¿Cómo nos pulen Dios?
Cómo Dios nos pule
En ocasiones, Dios nos refina a través de nuestras interacciones y diálogos con otros. Aprendemos tanto de lo que debemos hacer como de lo que no, siguiendo sus ejemplos. Un proverbio que ilustra este principio dice: “El hierro se afila con el hierro; así el hombre afila el rostro de su amigo” (Proverbios 27:17).