¿Cómo lavar ropa blanca para que no se ponga amarilla?
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Consejos para mantener la ropa blanca brillante
El limón actúa como un blanqueador natural, además de limpiar y desinfectar tejidos. Para usarlo, corta un limón en rodajas y colócalo en un recipiente con un litro de agua hirviendo. Luego, sumerge las prendas blancas que han adquirido un tono amarillento o grisáceo y déjalas reposar durante 40 minutos. Después de este tiempo, puedes lavarlas en la lavadora.